Lenguaje corporal y su significado

Empezamos con un pequeño ejemplo: Cuando le sonreímos a alguien, esa persona suele devolvernos la sonrisa. Gracias a la sensación de causa-efecto, se generan sentimientos positivos en los dos.

Los estudios demuestran que la mayoría de los encuentros funcionan bien, duran más tiempo, tienen resultados más positivos y mejoran drásticamente las relaciones cuando se intenta sonreír y reír regularmente hasta convertirlo en una costumbre.

El humor cura.

Desde los 3 patrones efectores: gesto facial, respiración y gestión corporal, analiza lo siguiente:

  1. Ejercicio de autobservación: Cómo me posiciono yo frente a los demás (pareja, compañero de trabajo, vecino…)
  2. Según el contexto identifica tu postura confortable.
  3. Observación del lenguaje corporal del otro e interpretarlo.
  4. Cuando analizar las emociones asociadas a mi propio cambio postural.

Cambiando el lenguaje de nuestro cuerpo podemos cambiar muchas cosas de nuestra vida: nuestro estado de humor antes de salir de casa, sentirnos más confiados en el trabajo, agradar más a los demás y ser más persuasivos o convincentes.

Con pequeños cambios llegaremos a relacionarnos de otra forma con las personas que nos rodean y esto cambiará su forma de relacionarse con nosotros.

La primera sensación al cambiar nuestra forma de expresar con el cuerpo es de incomodidad, siendo muy conscientes de nuestros movimientos, expresiones y gestos. Podemos tener la sensación de que los demás se dan cuenta.

Además de aplicar estos consejos, si tienes preguntas concretas sobre cómo trabajar tu lenguaje corporal, escríbeme.

 

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